¿Qué fue de aquel mundo lleno de imaginación y fantasía?
Pensaba que iba a durar para siempre, que todo sería perfecto gracias a la poca ingenuidad que aun quedaba.
Nuestra imaginación no tenía límites, podíamos volar a cualquier lugar sin preocuparnos por nada ni por nadie. Imaginábamos ser cualquier cosa sin preocuparnos por si hacíamos el ridículo. No teníamos un pasado del que escondernos o avergonzarnos o un futuro del que preocuparnos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario